Encontraron el cuerpo calcinado de un comerciante que estaba desaparecido y detuvieron a su socio
Marcelo Juan Ferrufino era buscado desde el 26 de mayo cuando viajó desde Lomas de Zamora para trabajar en las fiestas patronales de Santiago del Estero. La Justicia investiga un crimen por razones económicas.
Un hombre de 54 años, que estaba desaparecido desde hace una semana, fue encontrado muerto en una zona de monte en el interior de Santiago del Estero. La Justicia sospecha de un crimen por razones económicas, ya que la víctima había ido con 30 mil dólares a hacer negocios en Villa Mailín.
Marcelo Juan Ferrufino era buscado desde el 26 de mayo, cuando viajó desde Lomas de Zamora, en la provincia de Buenos Aires, para trabajar en las fiestas patronales. Pero nunca llegó a destino y, después de varios días después, encontraron su cuerpo semicalcinado a la vera de la ruta 159, en el kilómetro 11.
Ferrufino era comerciante, creyente y había hecho casi mil kilómetros para asistir a la Fiesta del Señor de los Milagros. Su idea era aprovechar el evento para montar su puesto y subalquilar terrenos a otros feriantes, como hacía desde 2006. Pero esta vez algo salió mal.
“Es como si se lo hubiese tragado la tierra”, dijo un familiar cuando radicó la denuncia por la desaparición. Es que el hombre contestó los llamados a su hija y celular estaba apagado durante una semana.
La fiscal Alejandra Sobrero ordenó una serie de rastrillajes con drones y perros que permitieron dar con el cadáver a tan solo dos kilómetros del santuario donde se congregan los peregrinos todos los años.
El principal sospechoso: un “amigo” que le alquilaba el terreno
Después de un investigar con quiénes había estado la víctima el día de la desaparición, la Policía detuvo a Alexis Maldonado, el hombre que le alquilaba a Ferrufino el predio donde iba a trabajar, y que actuaba como una especie de socio.
Las versiones de Maldonado nunca cerraron. Primero contó que Ferrufino se había ido sin avisar; y después que habían salido juntos a comprar chanchos en Colonia Dora, donde lo perdió de vista. Las pruebas lo dejaron expuesto: en su casa encontraron 300 mil pesos, palas, telas quemadas y otros elementos que ahora serán peritados.
Ferrufino había dejado sus pertenencias en la habitación. No se llevó ni una muda de ropa. Para la fiscalía, fue asesinado a sangre fría luego de una emboscada. Investigan si hubo un conflicto económico por el doble alquiler de terrenos a partir de una estafa que habría generado tensión entre los puesteros.
Sin embargo, todavía hay muchas piezas por encajar. Maldonado, que es hermano de un funcionario policial, permanece detenido y podría enfrentar una imputación por homicidio agravado, un delito que contempla prisión perpetua. Mientras tanto, se baraja la posibilidad de que haya actuado con un cómplice.
“Se habla de una mafia detrás”, deslizó una fuente cercana a la causa. Varios puesteros ya declararon que también fueron estafados y ahora se intenta reconstruir la cadena de negocios entre Ferrufino y Maldonado.
La autopsia será clave para confirmar si el comerciante fue asesinado a puñaladas antes de que intentaran incinerar su cuerpo. Mientras tanto, la familia aguarda poder trasladar sus restos a Buenos Aires para darle sepultura.